La homofobia es un hecho real existente en nuestra sociedad, y que sucesos como el de la profesora Gloria María Tomás y su conferencia en la Universidad Autónoma, demuestran que es un problema que hay que atajar, tanto con acciones de sensibilización y educación, como con leyes que penalicen cualquier acto de homofobia, y sobre todo, si proceden de ámbitos públicos, como puede ser la Universidad, o la esfera de la justicia (recordemos a la jueza homófoba de Denia), o los casos de homofobia laboral (despidos y mobbing que sufren homosexuales y transexuales en sus trabajos), o la situación que viven muchos menores y adolescentes en sus centros escolares, insultados o agredidos por su orientación sexual.
La homofobia es una enfermedad psico-social que se define por tener odio a los homosexuales. La homofobia pertenece al mismo grupo que otras enfermedades parecidas, como el racismo, la xenofobia o el machismo. Este grupo de enfermedades se conoce con el nombre genérico de fascismo, y se fundamenta en el odio al otro, entendido éste como una entidad ajena y peligrosa, con valores particulares y extraños, amenazadores para la sociedad, y -lo que es peor- contagiosos. No te pierdas este vídeo.La homofobia, como las demás variantes del fascismo, prepara siempre las condiciones del exterminio. Pasiva o activamente crea y consolida un marco de referencias agresivo contra los gays y las lesbianas, identificándoles como personas peligrosas, viciosas, ridículas, anormales, y enfermas, marcándoles con un estigma específico que es el cimiento para las acciones de violencia política (desigualdad legal), social (exclusión y escarnio públicos) o física (ataques y asesinatos).
Y es que a los homóbofos se les va la lengua, expresan claramente lo que sienten aunque luego siempre rectifican o dicen no haberlo dicho, como esta noche en Tele5 que Jesús Inciesta ha comparado a los homosexuales como “las malas hierbas” o “Cardos”. Notar el pregonero de la Semana de Sevilla que no pierde la oportunidad de discriminar, de crear clases, de diferenciar de forma maniquea a las personas. Todo en contra de que todos seamos iguales, con los mismos derechos. ¿Serán superiores?
Un respeto a todo el mundo, por favor.
3 comentarios:
gracias por defender lo que estamos hart@s de defender. la igualdad
felicidades por este articulo. Senador Lacueva. Del resto no voy a opinar. Este se lo puedo llegar a agradecer.
estoy de acuerdo con eso de la homofobia,son una mierda racistas
ah y por la imagen esa de medio aceptar no estoy muy de acuerdo,por que primero alguien que no es homofobico pero tampoco les gusta mucho las parejas gays no es malo,solo es gente normal que quiere llevarse bien con el mundo a menos que ustedes tambien empiecen a ser racistas
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