¿Por qué la derecha defiende el despido libre?

Los trabajadores, según Aznar, han de estar destinados a pagar la factura de la crisis
José María Aznar, presidente de la FAES, ejerce portavoz del empresariado y de vigía de Rajoy: “España, sinceramente creo, no puede seguir enviando a más de 7.000 personas diariamente al desempleo y negarse a hablar de una reforma laboral imprescindible”, sentencia el jefe moral del PP. El despido libre, dicho en formato aparentemente más digerible, ya había sido reivindicado desde hace mucho tiempo desde FAES y otras fundaciones más o menos conservadoras.

Por si hubiera alguna duda respecto al posicionamiento del PP a propósito de la cuestión aludida, Aznar participa de forma activa en la campaña de las elecciones europeas, satisfaciendo de este modo la solicitud de Jaime Mayor Oreja, el líder de la candidatura conservadora en las elecciones del 7 de junio. Véase la fotografía del Gobierno de Aznar.
Así pues, escuchamos como una catarata de razonamientos exigiendo reformas laborales que son sinónimo de despido libre. “Flexiseguridad o flexiguridad” como Mariano Rajoy que presume en la actualidad de moderado, o como su colega Soledad Becerril se jacta de plantear en las Comisiones Mixtas de Relaciones con las Comunidades Europeas.

Las teorías de Aznar se ajustan a sus planteamientos de neoliberalismo radical. Ya no importa que tales propósitos estén en decadencia, porque la crisis económica internacional ha sido el fruto de políticas neoliberales presentadas como dogmas de fe desde los ya lejanos tiempos de Ronald Reagan o de Margaret Thatcher, ahora el camino lo marca el Gobierno de EEUU que precisamente da un viraje total en estas y otras cuestiones. Sólo hace falta ver el cambio del accionariado de GM y el cambio de política empresarial que ha hecho de una empresa en quiebra a una compañía con futuro.Cuando esta crisis económica, generada por los excesos del liberalismo económico, ha obligado a la intervención de los Gobiernos en el denominado libre mercado y ha conseguido por fin la resurrección del británico John Maynard Keynes, asesor del presidente Roosevelt con sus recetas de corte socialdemócrata, ni siquiera ahora los neoliberales se repliegan al menos a sus cuarteles de invierno. Aznar continúa, en sus trece, avalando los principios básicos de la ley de la selva. A la vieja Europa de la economía con rostro humano y cohesión social, Aznar la acusa de falta de “flexibilidad y de dinamismo” en relación a EEUU. Yo prefiero la estabilidad laboral del 85% de los trabajadores españoles que el 92% de la precariedad laboral, sanitaria y social del trabajador de EEUU.En resumen, en las elecciones europeas lo que está en juego son dos modelos económicos, no homologables: El modelo conservador/liberal que procura proteger a los más ricos, a los más poderosos, a los más prepotentes. O el otro modelo, el modelo socialdemócrata que intenta proteger sobre todo a los más pobres, a los más débiles, a los más vulnerables. Uno lo encarna Rajoy por delegación de Aznar. El otro lo representa José Luis Rodríguez Zapatero. Está pues muy claro por qué el PP defiende el despido libre. Porque, según la derecha de Rajoy, son los trabajadores los destinados a pagar la factura de la crisis.

Mientras los analistas, que no fueron capaces de prevenir lo que nos acontece, se plantean estudios de cómo y cuándo se producirá el ansiado relanzamiento económico.

-¿Por qué?

-Por que no les puede pillar de improvisto, están al acecho ante las futuras oportunidades de negocio. No sea que se queden sin sacarle la oportuna tajada.