martes, 23 de febrero de 2010

Aquel 23 F





Aquel día fue un día triste, nublado pero no se atrevía a llover.
Esa tarde teníamos clase por la tarde como casi todo el curso, primero Análisis Numérico, luego Investigación Operativa, Análisis Matemático y Computación.
Estábamos en la clase de Análisis Matemático, tercera hora de la tarde, en el pasillo superior de la Facultad de Ciencias de la Universidad de Zaragoza.
El Profesor Cuadra, con la mitad de la pizarra llena de definiciones, lemas, teoremas y demostraciones, estaba explicando las propiedades de “los conjuntos medibles”.
En ese momento, cuando acaba de encender mi Ducados y Cuadra se limpiaba la mano en un guardapolvo, tipo bata blanca, llamaron a la puerta del aula.
Inmediatamente entraron dos, siempre he creído que eran de Físicas, y con voz firme dijeron: “La Guardia Civil ha entrado en el Congreso de los Diputados”.
Era media tarde y nosotros estábamos intentando concretar qué conjuntos eran numerables y cuales no.
Inmutable, Cuadra continuó con su razonamiento como si nada hubiera ocurrido, pero a los dos minutos, se giró y dijo: “¿Cómo podemos estar aquí si la Guardia Civil ha entrado en el Congreso de los Diputados?”.
Sólo dos minutos bastaron para que nuestro profesor apreciara lo que había ocurrido. Sólo él aprecio en breve espacio de tiempo la trascendencia de lo acontecido.
A los cinco minutos estábamos todos buscando información, llamando a quien podíamos y preguntando por nuestras familias.
“¡Asamblea de Distrito en el Aula Magna de Ciencias!”, fue la siguiente consigna que recorrió toda la Universidad, ¿esta tarde o mañana por la mañana?

Breve comentarios con los compañeros y a retiro a ver que ocurría, como la mayoría de los españoles, SER, televisión y mucho miedo.
Mientras en Alcañiz, la sede del PSOE y UGT hervía de actividad, esconder todo lo que tuviera algo que ver con afiliados, simpatizantes y seguidores.
Por lo que pudiera pasar, todo guardado y escondido. Prudencia y paciencia.
José María Pascual convocó a todo el ayuntamiento de Alcañiz y solicitó calma y a la espera.
El desenlace lo conocemos todos y como salió, el ya 24 de Febrero, Carmen Solano del Congreso de los Diputados en compañía de sus compañeros y compañeras.
Esta tarde, desde el escaño, he pensado en lo que ha pasado desde entonces y de cómo podía haber cambiado todo esa tarde-noche en la que hasta José María García hacia Hora 25 desde las puertas del Congreso de los Diputados.
He pensado en cómo se debieron de sentir los Diputados y el Gobierno, hace hoy 29 años, con ese secuestro no sólo de personas sino también de Soberanía y de Derechos y Libertades.
He pensado en lo importante de la Democracia, de los demócratas y de que tenemos todas las posibilidades de salir adelante, de hacer lo que debemos hacer y lo que nos exigen y se merecen todos los ciudadanos y ciudadanas.
He pensado que la libertad que disfrutamos no es un regalo sino que es un logro conseguido por la lucha de muchas personas que estaban, y lo están, convencidas que vale la pena luchar por la igualdad, la libertad y la justicia.
Cuadra y el resto de los alumnos nos dimos cuenta enseguida lo que estaba en juego.

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